POR EDUARDO AZATO / Ed.217 MARZO-ABRIL 2022

Arte y belleza natural en nueve hectáreas que pueden verse a un par de horas de Tokio.

A un par de horas de Tokio -a unos 80 kilómetros de la capital-, en la prefectura de Tochigi, se encuentra uno de los parques más bonitos del Japón, el Ashikaga Flower Park, un lugar cuya visita es frecuentemente recomendada por los operadores turísticos.
Ubicado en las afueras de la ciudad histórica de Ashikaga (allí funcionó la escuela más antigua del Japón y se asentó uno de los clanes, el Shogunato Ashikaga, que gobernó el Japón por más de dos siglos), el parque tiene cientos de plantas y árboles que se muestran durante el año a través de diseños y arreglos artísticos en ocho períodos definidos.
A escasas semanas de ingresar a la estación primaveral, es imperdible hacerle una visita a mediados de abril, porque el parque lucirá espectacular durante mes y medio con la presencia de más de 350 árboles de glicina, originarios de China y Japón (llamados también wisteria o flores fuji), y 5 mil azaleas en completa floración.
El medio periodístico CNN, en el 2014, calificó este evento del parque como uno de los destinos “de ensueño” que todo turista debería conocer.

ATRACCIONES TODO EL AÑO
El parque fue creado en 1968 sobre una superficie de nueve hectáreas y solo en 1990 se convirtió en una empresa -Ashikaga Flower Resort- que transformó lo que hasta ese momento era el Jardín Botánico Hayakawa en un parque temático que hasta antes de la pandemia atraía anualmente a más de un millón de visitantes.
Ocho temporadas durante el año y eventos especiales para cada una con flores de estación en muestra, hacen que el parque pueda ser visitado durante todo el año, tanto de día, como de noche, cuando los arreglos luminosos en varias áreas del lugar ofrecen un paisaje diferente, debiendo resaltarse los finos diseños artísticos utilizando elementos como cúpulas, pirámides y arcos, tanto en los jardines, como en las lagunas y cascadas de agua.
De comienzos de marzo a mediados de abril transcurre el “Haruno hana matsuri”, un festival de flores de primavera en el que se lucen 20 mil flores de tulipán, sakura y “yukiyanagi” (una especie de la familia de las rosáceas).

EN EL MUNDO DE “AVATAR”
Seguidamente, de mediados de abril a mediados de mayo, tiene lugar uno de los eventos que congregan a más visitantes, nacionales y del extranjero. El “Fujinohana monogatari”, que es el internacionalmente conocido festival de glicinas y azaleas. Todo el parque se adorna con alegorías diseñadas en varios colores, en uno de los mayores espectáculos naturales que puedan verse en esa época en el Japón. En Japón se les llama “fujinohana” y son plantas trepadoras que crecen frondosamente y lucen muy bellas en racimos de colores púrpura, blancas, rosadas y azules un túneles que tienen hasta 80 metros de longitud.
Hay árboles de glicina que tienen alrededor de 150 años y fueron trasplantados desde lugares lejanos. Muchos visitantes mencionan con frecuencia sentirse en el mundo de “Avatar” bajo el ambiente que le da el color morado de sus flores. Junto a las wisterias, también podrán verse miles de azaleas y peonias.
De mediados de mayo a comienzos de junio, el Ashikaga Flower Park da paso al “Rainbow Garden”, con 2,500 rosales de varios colores, 500 clemátides y 1,500 plantas de azalea. Para junio el parque se tiñe de azul y blanco con la coloratura y el aroma que le otorgan el florecimiento de miles de hortensias y flores de iris.
Con la llegada del verano, de julio a setiembre, es el turno de flores acuáticas con alrededor de 1500 nenúfares de todos los colores que destacan en los estanques del parque, junto a lirios tropicales y lantanas. Entrando a octubre y poco antes del otoño, el parque adquiere colores púrpuras con la presencia de 300 mil salvias que forman un extenso tapiz violeta dentro del parque.

• 

• 

• 

• 

De mediados de octubre a mediados de febrero tiene lugar uno de los tres mayores espectáculos de iluminación de la región de Kanto. El evento “Hikarino hanano niwa” (o el Jardín de las Flores Luminosas), que ofrece cada mes un show de luces diferente, aprovechando también las festividades navideñas y de año nuevo. La idea de abrir el parque por la noche atrayendo a los visitantes con eventos especiales nació hace exactamente 20 años y año a año la producción se supera.
Para la última temporada se usaron más de cinco millones de luces para adornar un espacio de 100 mil metros cuadrados. Las glicinas multicolores de la primavera son reemplazadas en esta temporada por luces LED que le otorgan un aspecto sensacional a cada sector del parque.