POR: MARIO KIYOHARA / Ed.225 OCT-NOV 2023

«Si estamos solos en el universo, seguro sería una terrible pérdida de espacio”. Carl Sagan (1934-1996)

¿Es un pájaro? ¿Es un avión? ¿O es solo una forma de distraernos y olvidarnos de los temas más importantes que no quieren que sepamos? De pronto, un día de julio del 2023, todos empezaron a hablar de ovnis, marcianos, invasión, y el reestreno de la serie ochentera “V, invasión extraterrestre”…

Durante años, el Gobierno de Estados Unidos ha ignorado en gran medida los informes sobre misteriosos objetos voladores, los cuales han sido vistos moviéndose a través del espacio aéreo militar restringido.

Sin embargo, esta vez David Grusch, exoficial de inteligencia de la Fuerza Aérea, junto a dos oficiales más, testificaron en el Congreso, en una audiencia sobre ¿por qué los avistamientos de ovnis son un problema de seguridad nacional? Esta declaración, cubierta por todos los medios alrededor del mundo, y realizada en la capital política del mundo, atrajo el interés de todos los seres humanos en saber si en verdad estamos solos en el universo.

¿Pero qué dijeron bajo juramento?

• Hubo ovnis, avistados con tecnología superior a la humana, que desafían las leyes físicas y el soporte del ser humano a sus fuerzas G.
• Que el gobierno de los EEUU conoce desde hace 30 años del tema. Que tiene posesión de dicha tecnología, que la oculta y malversa fondos para destinarlos a estos proyectos.
• Que los seres extraterrestres están interesados en la energía nuclear y constituyen un riesgo potencial para la humanidad.

Si bien este tema no es novedoso ya que en tiempos modernos y por muchos años, diversos científicos de renombre como Nicolás Tesla, Carl Sagan o Frank Drake e instituciones como SETI o la Sociedad Planetaria, han trabajado para descifrar el misterio de manera seria, pero no concluyente. Una cosa queda clara hasta ahora: Es imposible que, con tantos millones de estrellas y planetas, la tierra sea la única con condiciones de vida, y la humana sea la única especie inteligente.

Pero, ¿Qué implicanciones tendría una respuesta oficial (y las pruebas) a la pregunta de si estamos solos? Es obvio que, llegado ese día, todo lo que hoy nos ocupa pasará a segundo plano, habrá muchas más preguntas y sobre todo temores a lo que se avecina. Podríamos mencionar algunas generales como:

Científicas: Confirma la hipótesis que es probable que haya un planeta en condiciones físicas semejantes a la tierra. Igualmente, enunciados de la física teórica como los agujeros de gusano, motor de curvatura, etc. serían validados.

Filosóficas: Descarta el pensamiento “unicista” de Aristóteles y la cosmología geocentrista recogida por Santo Tomás de Aquino (y que refuerza las bases del cristianismo) para sustentar el dogma de la creación por parte de un Dios omnipresente, impulsado luego por Newton, Kant y Hegel (“el hombre es la criatura favorita del universo”). Por otro lado, se confirma la hipótesis de la “pluralidad de los seres cósmicos” propuesto por Epicuro y Demócrito. Se crea el debate si la filosofía de ambos seres vivientes podrían coexistir o ser “equivalentes” en la forma y fondo.

Teológicas: Generaría una crisis de fe que sugeriría la existencia de un ser superior, creador, de manera física. De la misma forma, son de esperar movimientos adversos o violentos por parte de sectores religiosos de tipo integrista cuya visión del mundo es desafiada ante el hallazgo; o frente a la constatación de que el ser humano no es la única especie inteligente del universo

Y ¿Cómo sería la reacción de la gente?

La respuesta la aportó el cineasta Orson Welles en 1938 al emitir la conocida versión radiofónica de la novela de H.G. Wells “La guerra de los mundos”. La perfecta puesta en escena de Welles provocó la aterrada respuesta de los habitantes de New Jersey, causando un real pánico en toda la ciudad. ¿Es factible una reacción similar por parte de determinados sectores de la población cuando se produzca el descubrimiento del que venimos hablando? Para la NASA es lo más probable que sea así, por ello se menciona como punto importante la previsión de las respuestas sociales ante el hallazgo definitivo.

La verdad está ahí afuera…