UNA RUTA DIFERENTE: FERRY, HIKING Y BUDAS GIGANTES. MONTE NOKOGIRI Y TEMPLO NIHONJI, ENTRE NATURALEZA E HISTORIA

TEXTO Y FOTOS: GABRIELA NAKAYOSHI / ED.234 JUL-AGO-SEP 2025

A tan solo un par de horas desde Yokohama, el Monte Nokogiri en la prefectura de Chiba es una joya poco conocida que combina naturaleza, historia, aventura y cultura. Lo más llamativo de esta excursión es que incluye un tramo en ferry, lo que ya convierte el viaje en una experiencia fuera de lo común.

El viaje: desde Yokohama hasta Kanaya Port

Comienza tu aventura tomando un tren desde la estación de Yokohama hasta la estación Keikyu Kurihama (aprox. 40 min, en el Limited Express costo de ¥240). Desde allí tienes que ir al puerto de Kurihama (Tokyo-Wan Ferry Port Kurihama). Puedes llegar caminando, en bus o taxi.
•CAMINANDO: serán entre 20-25 minutos (aproximadamente 2km)
•BUS: Línea u(Hisashi 7): hasta el Puerto de Kurihama.
Línea (Hisashi 8): hasta Nobi Kaigan, pasando por el Puerto de Kurihama. Ambas líneas llegan en aproximadamente 10 a 12 minutos a un costo de ¥240. Los buses salen desde la paradero Nº 2 frente a la estación Keikyu Kurihama.
•TAXI: 8 minutos y un costo aproximado de ¥800
Desde el puerto de Kurihama embarca en el ferry hacia Kanaya, al otro lado de la bahía de Tokio.
Costo del pasaje: adulto solo ida: ¥900 (ida y vuelta: ¥1,780).
El recorrido dura aproximadamente 40 minutos. A bordo, cuentas con asientos cómodos, una pequeña cafetería, baños y máquinas expendedoras.

En el ferry podrás desplazarte libremente por la cubierta, donde disfrutarás de la brisa marina, vistas panorámicas del mar,  del Monte Fuji en días despejados, e incluso de barcos cargueros y paisajes industriales de la bahía de Tokio.

Subida al Monte Nokogiri: Teleférico o hiking (senderismo)

Al llegar a Kanaya, se abre ante ti la silueta dentada del Monte Nokogiri, cuyo nombre significa literalmente “montaña sierra”. Puedes elegir dos formas de ascenso:

Teleférico: Si prefieres una opción más cómoda (o si viajas con niños), puedes tomar el Nokogiriyama Ropeway, que te lleva en unos minutos a la cima. El trayecto ofrece una panorámica increíble del mar, las montañas y, en días despejados, hasta del Monte Fuji.
La estación del teleférico está a solo 10 minutos caminando desde el puerto. Un boleto de ida cuesta ¥590 (ida y vuelta ¥1080).

Hiking: aventura en la naturaleza sin necesidad de entrada!
Si buscas una caminata gratuita, puedes subir el monte por rutas de hiking abiertas al público. El sendero comienza cerca de la estación y te lleva por caminos boscosos y empinados, atravesando restos de canteras y miradores naturales.
La caminata es de dificultad media, con muchas escaleras, terreno irregular y subidas pronunciadas, pero vale totalmente la pena.

Canteras históricas: cicatrices del pasado
Antiguas canteras de piedra, que datan del período Edo, fueron utilizadas para extraer material destinado a la construcción de edificios emblemáticos en Tokio y Yokohama. Hoy, los restos de la extracción industrial (paredes perfectamente rectas, túneles, pasajes ocultos y hasta vehículos oxidados abandonados) le dan un aire casi cinematográfico al recorrido.

El Gran Buda y el Templo Nihonji
Para quienes decidan pagar la entrada (¥700), el Templo Nihonji ofrece una experiencia aún más profunda. En su interior se encuentra el Gran Buda de piedra más antiguo y grande de Japón, con una altura de 31 metros. El lugar transmite una atmósfera de paz, espiritualidad y asombro. El recorrido por el templo es amplio, con senderos sombreados, estatuas ocultas entre la vegetación y vistas asombrosas en cada rincón y a la diosa Kanon de 30 metros.

Hyaku-Shaku Kannon
Se trata de una escultura de la diosa de la misericordia tallada en la propia pared, de 30,3 metros de alto (100 shaku, 1 shaku era una antigua medida japonesa, de aproximadamente 30,3 cm) y construida en la época moderna, entre 1960 y 1966. La estatua está dedicada a los fallecidos durante la Segunda Guerra Mundial así como a las víctimas de accidentes de tráfico y todo tipo de enfermedades.

Mirador al Infierno
Uno de los puntos más famosos es Jigoku Nozoki, una saliente rocosa en lo alto del acantilado que permite a los visitantes asomarse al abismo desde una altura imponente, ofreciendo vistas espectaculares del mar y la península de B?s?. El mirador está dentro del área del templo Nihonji.

1,500 Rakan esparcidos por el monte
Pequeñas estatuas de los discípulos de Buda se encuentran repartidas por los caminos de la ladera (en el área del templo Nihonji), sobre rocas de formas fantásticas y en pequeñas cuevas sagradas formadas por la erosión. Uno de los aspectos más llamativos e impresionantes es que todas las estatuas son diferentes entre sí: cada una tiene sus propias poses y estilos.

Recomendaciones

  • Calzado adecuado: El terreno puede ser irregular y empinado, con charcos de agua, barro, etc.
  • Hidratación: Lleva suficiente agua, especialmente en los meses calurosos.
  • Atención a los horarios: Ten en cuenta la salida del último ferry y el horario del teleférico. ¡No dejes que se te haga tarde! 
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