POR: EDUARDO AZATO S. / Ed.217 MARZO-ABRIL 2022
Esta quinceañera vive en Aichi y pasa muchas horas del día entrenándose para crecer como deportista. El año pasado entró al circuito internacional de patinaje artístico y lo hizo defendiendo al Perú. Conozcamos a Sorami Tanaka.
Nació en Japón y, como otros chicos de la segunda generación aquí, se identifica mucho también con su parte peruana. Hija mayor de un matrimonio “nipo-peruano”, Sorami Tanaka Espinoza debutó el año pasado en los Grand Prix de patinaje artístico sobre hielo en la categoría junior y lo hizo defendiendo al Perú.
Inicialmente como un pasatiempo para recrearse, Sorami se tomó en serio el patinaje sobre hielo cuando cumplió los 9 años y pasó a integrar un club de “skate” y adiestrarse con entrenadores. Pronto obtendría sus primeras medallas en torneos regionales, lo que la motivó a continuar con su preparación en centros especializados dirigidos a la alta competencia.
No pasaría mucho tiempo para que decidiera participar representando al Perú, donde el patinaje artístico sobre hielo viene creciendo (ver cuadro).
La deportista ingresó al circuito de competencias en la división juvenil organizadas por la Unión Internacional de Patinaje sobre Hielo (la International Skating Union (ISU), una suerte de FIFA de este deporte) a través de su participación en los campeonatos de Courchevel (Francia) y Liubliana (Eslovenia), donde realizó su mejor actuación y pudo clasificarse entre las 25 mejores patinadoras, superando sus puntuaciones personales.
“Sorami estuvo muy feliz cuando recibió en casa una carta de la Federación invitándole a representar al Perú en los dos torneos. Y es que podría cumplir así una promesa que le hizo a mi hermano, su tío Ernesto, fallecido el año pasado. Él le decía siempre que persevere en el deporte porque, aunque era japonesa, algún día también podría representar al Perú. Recuerdo que mi hija se emocionaba al ver la bandera peruana flameando junto a la de otros países participantes en los campeonatos a los que fue. Se identifica mucho con el Perú, con su cultura, ha ido muchas veces y le encanta lo peruano”, cuenta su madre, Maritza.
“EL CÓNDOR PASA” COMO PROGRAMA
Cabe resaltar que Sorami desarrolló los programas cortos de estos torneos inscribiendo -como música de competencia para la temporada-, un arreglo especial de “El Cóndor Pasa” cuya coreografía fue creada nada menos que por la dos veces campeona mundial y tres veces campeona japonesa Ando Miki, quien la instruyó antes de su viaje a Europa.
Quien diseñó los movimientos para su programa libre fue otra estrella del patinaje, la siete veces campeona japonesa de Ice Dancing, Cathy Reed. Ambas son instructoras del club en el que se entrena la joven patinadora.
“Sorami se emocionó cuando la designaron como seleccionada y siempre tuvo claro que quería una melodía representativa peruana para su actuación, para así también poder difundir lo nuestro. Inicialmente, desde Perú, mi hermano nos envió la música con versiones basadas en el arreglo original, las que su entrenadora rechazó, por ser muy lentas. Posteriormente nos llegó un arreglo más moderno de “El Cóndor Pasa”, que fue con el que Sorami hizo su rutina”, revela Marizol.
La ilusión de la deportista por estrenarse en competencias en el extranjero pudo más que la pandemia. Sus entrenadoras declinaron acompañarla a Francia en agosto, dado que las restricciones impuestas incluían varios días de cuarentena, aunque tuvieron la gentileza de guiarla a través de la internet, por lo que las instrucciones fueron dadas vía Zoom. Con mucha determinación, Sorami estuvo dispuesta hasta a irse sola, para no dejar pasar la oportunidad, siendo acompañada por su madre finalmente. Todo era nuevo para ambas y de alguna manera los nervios del debut no le permitieron dar todo de sí. Ya en Eslovenia, tras la experiencia francesa que la fortaleció mentalmente, las cosas marcharon mejor y consiguió batir sus registros personales.
“Aunque está entrando a variaciones en el salto triple, esta vez Sorami prefirió no arriesgar alguna caída y acumular puntaje en otras piruetas o en secuencia de pasos. Al final de las dos competencias, todo corrió según lo planeado. Fue un gran aprendizaje”, dijo su madre.
Como hecho anecdótico, entre ambas competencias Sorami pudo entrenarse por unos días en Italia, junto a la representante de ese país. Por casualidad, pudo conocer allí al ex patinador español Javier Fernandez, quien aceptó ver su entrenamiento por unos minutos y darle algunos consejos para mejorar su rutina. El dos veces campeón mundial y siete veces consecutivas campeón europeo, felicitó a Sorami manifestándole su complacencia por la presencia de una representante de Perú y porque el patinaje también se esté difundiendo en Sudamérica.
PREPARACIÓN EXHAUSTIVA
Para Sorami el patinaje sobre hielo es su gran pasión, una actividad que ocupa espacio privilegiado además en toda la familia Tanaka, dado que sus dos hermanas menores, las gemelas Hoshimi y Tsukimi, de ocho años, también le siguen los pasos a la “oneechan” y comenzaron aún más temprano su relación con los “links” de patinaje. Su padre, Shigeyuki, fue quien la llevó por primera vez a una pista y Marizol, de tanto acompañarla, ya se ha convertido en una experta en la disciplina.
Nadie como ella para saber que solo el entrenamiento y el sacrificio le permitirán mejorar su nivel. Estudiante del último año de la secundaria elemental (chuugakkou), luego de las clases se entrena en su club durante tres horas, para seguidamente trasladarse una hora hasta la ciudad de Toyota para practicar tiempo adicional en la pista de la Universidad Chukyo, que es un centro de entrenamiento para atletas de alta competencia; una suerte de templo del deporte en el Japón, dado que sobre su hielo solo se entrenan estrellas del nivel de Uno Shoma (actual número dos del patinaje masculino japonés) o ex campeones de talla internacional como la popular Asada Mao, la propia Ando Miki, Hongo Rika, Murakami Kanako y Kozuka Takahiko, todos ex alumnos de la universidad.
Sorami pasa muchas horas del día movilizándose, y entrenándose en las pistas de hielo, una rutina que realiza desde los nueve años.
El patinaje sobre hielo es popular en Japón, tanto como deporte cuanto espectáculo. Los torneos que se realizan en las diferentes categorías concitan la atención y el público va a los escenarios de competencia, todo ello motivado también por la constante aparición de figuras jóvenes que destacan internacionalmente, como es el caso actual del súper campeón Hanyu Yuzuru, la gran estrella japonesa del patinaje.
Pero llegar a destacar o desempeñarse profesionalmente requiere de mucho sacrificio y altos costes, dado que será necesario pagar al club, así como la asesoría de entrenadores y alquilar pistas para entrenamiento, entre otros gastos.
“Es un deporte que se hace más caro a medida que las condiciones van mejorando, dado que se requiere más inversión para optimizar la preparación. No es más recreación, ahora es alto rendimiento. Prácticamente todo lo que gano en mi trabajo va destinado a la preparación de Sorami como atleta profesional. Al ser un ambiente sumamente competitivo, hay chicas que optan por prepararse en el extranjero y ello también tiene un costo. Felizmente, Ajinomoto del Perú creyó en las condiciones de Sorami y es su patrocinador desde hace unos meses, lo que permite progresos en su desempeño deportivo. Esperamos cerrar otro patrocinio en breve. Aunque aún, por edad, está en la categoría junior, a partir de los 16 años ya puede entrar a competir en la división senior, es decir, en la categoría máxima, alternando con las mejores del mundo”, cuenta.
Pero Sorami también se toma en serio su formación educativa, por lo que por algunos meses flexibilizará su entrenamiento regular para prepararse para competir en otro terreno no menos importante: prestar exámenes para aprobar la secundaria superior (koukou) en la escuela de su elección. Ello no le permitió tomar parte a comienzos de este año en dos torneos en Rumania e Italia.
Sorami sueña con ganar alguna distinción compitiendo en representación del Perú. Se ha trazado como meta futura poder difundir a través de sus actuaciones el patinaje artístico sobre hielo en el Perú, y no solo en Lima, sino también en las regiones, donde podrían revelarse también nuevas figuras del deporte.
ESPERAMOS QUE SIGA REPRESENTÁNDONOS “Para nosotros ha sido realmente un gusto poder saber que Sorami, siguiendo sus raíces peruanas, quiso representar al Perú en torneos internacionales de primer nivel como fueron los Grand Prix Junior en los que participó el 2021. Esperamos pueda seguir representándonos este año y el próximo quizás participar en la división Senior, que es el máximo nivel en competencias de patinaje sobre hielo”, comentó para KYODAI Magazine, Jorge Ormaeche, vicepresidente de la Federación Peruana de Patinaje sobre Hielo y miembro del comité técnico. El reconocimiento de una federación peruana ante la Unión Internacional de Patinaje sobre Hielo (ISU, en sus siglas en inglés, es el organismo mundial que se dedica a regular las normas del patinaje sobre hielo a nivel competitivo, así como de celebrar competiciones), así como del Instituto Peruano del Deporte y el Comité Olímpico Peruano, viene haciendo posible que varios deportistas peruanos como Sorami puedan acceder a competir en los grandes torneos internacionales. Presidida por Pilar Núñez, la Federación tiene cuatro años de creada y su objetivo a corto plazo es poder construir una pista de hielo propia que les permita difundir más esta disciplina. La que existía en Lima cerró antes del inicio de la pandemia y no ha podido volver a ponerse en funcionamiento. Actualmente tienen afiliados a medio centenar de deportistas que entrenan seis veces por semana, manteniéndose en forma para cuando deban volver al hielo, hecho que esperan tenga lugar muy pronto. Pese a no tener actualmente una pista para prácticas en el Perú, los deportistas han podido llevar a cabo bases de entrenamiento en Ecuador y en los Estados Unidos. No obstante ser un deporte nuevo para el medio peruano y poco difundido, el nivel del patinaje peruano a nivel continental es de los mejores, como lo demuestran los resultados obtenidos en torneos sudamericanos y otros de corte internacional llevados a cabo en la región hasta hace un par de años con una cosecha de medallas que superó todas“Para nosotros ha sido realmente un gusto poder saber que Sorami, siguiendo sus raíces peruanas, quiso representar al Perú en torneos internacionales de primer nivel como fueron los Grand Prix Junior en los que participó el 2021. Esperamos pueda seguir representándonos este año y el próximo quizás participar en la división Senior, que es el máximo nivel en competencias de patinaje sobre hielo”, comentó para KYODAI Magazine, Jorge Ormaeche, vicepresidente de la Federación Peruana de Patinaje sobre Hielo y miembro del comité técnico. El reconocimiento de una federación peruana ante la Unión Internacional de Patinaje sobre Hielo (ISU, en sus siglas en inglés, es el organismo mundial que se dedica a regular las normas del patinaje sobre hielo a nivel competitivo, así como de celebrar competiciones), así como del Instituto Peruano del Deporte y el Comité Olímpico Peruano, viene haciendo posible que varios deportistas peruanos como Sorami puedan acceder a competir en los grandes torneos internacionales. Presidida por Pilar Núñez, la Federación tiene cuatro años de creada y su objetivo a corto plazo es poder construir una pista de hielo propia que les permita difundir más esta disciplina. La que existía en Lima cerró antes del inicio de la pandemia y no ha podido volver a ponerse en funcionamiento. Actualmente tienen afiliados a medio centenar de deportistas que entrenan seis veces por semana, manteniéndose en forma para cuando deban volver al hielo, hecho que esperan tenga lugar muy pronto. Pese a no tener actualmente una pista para prácticas en el Perú, los deportistas han podido llevar a cabo bases de entrenamiento en Ecuador y en los Estados Unidos. No obstante ser un deporte nuevo para el medio peruano y poco difundido, el nivel del patinaje peruano a nivel continental es de los mejores, como lo demuestran los resultados obtenidos en torneos sudamericanos y otros de corte internacional llevados a cabo en la región hasta hace un par de años con una cosecha de medallas que superó todas las expectativas.