Japón es el cuarto país a nivel mundial que mayor cantidad de residuos plásticos de un solo uso genera anualmente, o lo que es lo mismo: cada habitante de este archipiélago produce 37 kilos de residuos plásticos cada 12 meses. Una barbaridad.
En un país híper consumista como Japón pero con conciencia ecológica (una contradicción en sí misma), tanto el gobierno como la empresa privada están tomando diversas iniciativas para reducir el consumo de plástico en el día a día de la gente.
Estas iniciativas van desde la promulgación de leyes por parte de las autoridades para prohibir el uso de bolsas plásticas en tiendas y supermercados, hasta el lanzamiento de negocios como Ikasa, un sistema de alquiler de paraguas disponible a lo largo de todo Japón pero principalmente en Tokio.
Pero, ¿por qué una empresa estaría interesada en lanzar un negocio de alquiler de paraguas? Las respuestas son sencillas e íntimamente ligadas al esfuerzo por reducir el consumo de plástico: el paraguas es quizás el principal accesorio que utiliza el japonés común y corriente en un país donde llueve prácticamente a lo largo de todo el año; de los 120 millones de habitantes que tiene este archipiélago, la mitad utiliza paraguas de plástico descartable según un estudio realizado en el 2019 por la empresa de investigación Planet; por último, el paraguas es el objeto que más pierden los japoneses, y de acuerdo a datos proporcionados por la Agencia Nacional de Policías, solo el 1% de los decenas de miles de paraguas que se pierden anualmente es reclamado por su dueño, paraguas que en su gran mayoría son de plástico.
Ikasa es un sistema que a través de una aplicación para teléfonos inteligentes (disponible en App Store y Google Play), le permite al usuario alquilar paraguas por un pago mensual de 280 yenes, cantidad que le da derecho a utilizar dos paraguas diarios por el tiempo que sea necesario. También existe la posibilidad de alquilar un paraguas por un solo día por un costo de 70 yenes.
Si se toma en cuenta que un paraguas descartable cuesta como mínimo 500 yenes, que los paraguas del sistema Ikasa son amplios y de buena calidad, y que existen más de 800 puntos de alquiler en las principales estaciones de tren de las principales líneas de las grandes ciudades, pagar 280 yenes mensuales resulta un buen negocio, además de un negocio ecológico.